Las pastillas de freno pueden salvarte de un accidente automovilístico. Aunque parezcan pequeñas e insignificantes, son fundamentales en el sistema de frenado, pues de ellas depende que tu carro se detenga adecuadamente.
¿Por qué es tan importante saber cómo escoger las mejores pastillas de freno?
Para contestar eso, es necesario saber para qué sirven: cada vez que presionas el pedal, el material rasposo de las pastillas “chocan” con los discos de freno, lo que produce un roce entre fuerzas opuestas (en otras palabras, fricción). Esto hace que el carro pierda velocidad y se detenga.
Si usas pastillas de freno inadecuadas para tu vehículo, correrás el riesgo de desgastar todo el sistema de freno a mediano plazo. Además, podrías alargar la inercia por el frenado o sufrir un derrape.
¿Cómo saber si mi carro necesita pastillas de freno nuevas?
En general, no hay un kilometraje reglamentario para cambiar las pastillas de freno. Sin embargo, es recomendable prestar atención a estas variables o, en su defecto, revisarlas pasados los 25 000 km.
La mayoría de los vehículos modernos tienen un indicador en el tablero que advierte el desgaste de las pastillas de freno. Si no lo ubicas o prefieres hacer un chequeo manual, puedes hacer una inspección por ti mismo, sin acudir a un mecánico.
Primero, desmonta la rueda y, si es necesario, las pastillas del vehículo (todo depende del modelo). Si las pastillas de freno ya alcanzaron el índice de grosor mínimo, es momento de comprar unas nuevas. En caso de que tus pastillas no tengan un indicador, asegúrate de que no se vean gastadas ni delgadas (en promedio, 2 mm o menos).
Otra forma de saber cuándo cambiarlas: si tu carro hace ruido al frenar (por ejemplo, un chirrido) o si hay que aplicar fuerza adicional al pedal. Aunque no necesariamente indica un problema con las pastillas de freno, sí puede ser una señal de desgaste del sistema de frenado. Tal falla obliga a las pastillas a trabajar de más.
En trayectos cortos, como dentro de la ciudad, las pastillas de freno suelen gastarse más rápido que en viajes largos. Piensa que cuando manejas durante la hora pico, debes frenar más que cuando tienes toda la carretera para ti.
¿Cuál es el tipo de pastillas de freno ideal para mi carro?
Si aún conservas las pastillas originales, compáralas con las próximas a usar. Es la forma más segura de escoger las mejores pastillas de freno para tu carro.
¿No consigues la de la fábrica o no sabes cuál es la pastilla original? También puedes elegir de acuerdo con las necesidades de tu vehículo.
Las pastillas de freno se clasifican según su material, pues determina su duración y rendimiento:
- Cerámica. No contienen metales. Resisten más calor que las otras superficies, lo que las hace más duraderas. Recomendadas para carros pesados (camionetas) y carros livianos de uso diario en trayectos medianos (por ejemplo, dentro de la ciudad y/o viajes ocasionales). Aunque suelen ser costosas, son las más confiables porque trabajan bien en todo tipo de ambientes y no hacen ruido.
- Semiorgánica. Hechas de fibras de vidrio, caucho, entre otros. Son una alternativa intermedia económica de la cerámica, pero no ofrecen la resistencia que sus parientes orgánicos. Se desgastan más rápido, por eso no son una buena opción para vehículos pesados o de mucho uso.
- Semimetálica. Sirven muy bien para carros livianos a cualquier distancia. Combinan materiales orgánicos y metálicos que, a largo plazo, ofrecen una durabilidad estándar. Suelen producir un poco de ruido.
- Metálica. Su capacidad de freno no se ve afectada por la condición ambiental ni el suelo. Pese a que resisten menos calor que su competencia orgánica (como la cerámica), aceleran el desgaste del rotador y la batería del carro. Ideales para camionetas grandes, vehículos de carga o autos de alto rendimiento.
¿Quién debe cambiar las pastillas de freno?
Las pastillas de freno son bastante delicadas y deben manipularse con cuidado. Una mala instalación podría costarte todo tu sistema de frenado, e incluso un mal momento en carretera.
Lo ideal es que acudas a un taller automotriz o a una estación de autoservicio. Un mecánico especialista hará el trabajo de revisión, reemplazo y prueba completa, sin riesgos.